Tras proceder a la desinstalación de determinados controladores es muy probable que dejen una especie de rastro en forma de ficheros que, posteriormente, pueden causar algún problema en términos de incompatibilidad. Para evitar este tipo de situaciones cuentas con Driver Cleaner.
Su principal función consiste en borrar este rastro, precisando para ello tan solo unos segundos. El método de actuación del que dispone es compatible con drivers NVIDIA, ATI, Realtek y Creative, entre otros más.
Para eliminar cualquier rastro dejado por tus antiguos controladores basta con reiniciar el PC tras su desinstalación y, seguidamente, ejecutar Driver Cleaner con tal de proceder a dicha tarea.
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